En una reciente publicación, titulada Educación Física de Calidad, Guía para los Responsables Políticos, la UNESCO insta a los gobiernos y los planificadores de los sistemas educativos a invertir la tendencia negativa existente en este ámbito, que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha calificado de verdadera epidemia, ya que cada año causa la muerte de unos 3,2 millones de personas, esto es, una cifra dos veces mayor que las defunciones ocasionadas por el sida en nuestro planeta.
La Guía trata de abordar siete cuestiones preocupantes que puso de manifiesto la Encuesta mundial sobre la situación de la educación física llevada a cabo por la UNESCO el año pasado, a saber:
1. La diferencia persistente que se da entre las políticas de educación física adoptadas y su aplicación práctica.
2. Las continuas deficiencias observadas en la asignación de horarios para la educación física en los currículos escolares.
3. Los problemas relacionados con la pertinencia y calidad del currículo de educación física en los programas educativos.
4. La insuficiente calidad de los programas de formación inicial para docentes.
5. La calidad y el mantenimiento deficientes de las instalaciones para actividades físicas y deportivas.
6. La persistencia de los obstáculos que impiden impartir una educación física por igual a todos los escolares, así como el acceso de todos ellos a la misma.
7. La coordinación insuficiente de los componentes de las comunidades de padres y docentes.